Hoy os traigo un primero con un montón de vitaminas, una crema de verduras muy rica que suele gustar mucho a los niños, una manera muy fácil de hacer que coman verduras casi sin enterarse.
Se puede hacer más cantidad para guardar hasta tres días en la nevera, y así tener una cena rápida y nutritiva sin tener que cocinar a todas horas, espero que os guste.
INGREDIENTES
Una cebolla.
Seis zanahorias medianas.
Medio nabo.
Un puñadito de espinacas.
Un trocito de repollo.
Una patata.
Tres ramitas de apio.
Un brote pequeño de brócoli.
Un puerro.
Caldo de pollo.
100 ml de aceite de oliva virgen.
Sal pimienta y nuez moscada.
Una cucharada de queso crema.
PREPARACIÓN
1- Se pica la cebolla, no hace falta que sea muy pequeña, y se pone en una olla dónde habremos puesto el aceite de oliva a calentar previamente.
2- Se dora a fuego moderado, con cuidado de que no se nos queme.
3- Una vez dorada la cebolla, añadimos a la olla el resto de verduras cortadas en trozos no muy pequeños, cubrimos con caldo de pollo y añadimos sal
4- Dejamos que cueza lentamente, hasta que estén tiernas todas las verduras.
5- Cuando estén bien cocidas las verduras, apagamos el fuego y trituramos todo muy bien con la batidora.
6- Por último añadimos una pizca de pimienta negra y de nuez moscada el queso crema y acabamos de triturar todo junto.
Yo lo he decorado con un chorro de nata líquida y cebolla frita por encima.
Buen provecho!